sábado, 2 de marzo de 2013

“LA APREHENSIÓN DE ELBA ESTHER GORDILLO Y ALGUNAS DE SUS IMPLICACIONES”


Por: Ivonne Acuña Murillo

Primero, supone un reacomodo de fuerzas dentro del sistema político mexicano a partir de un reposicionamiento de la presidencia de la República frente a una estructura que en los últimos sexenios se ha fragmentado en diversos centros de poder y en la cual Elba Esther operaba como un factor que podía inclinar la balanza hacia uno u otro lado, ofreciendo votos a diestra y siniestra. Esto ha llevado a diversos analistas a afirmar “habemus presidente”. Lo anterior no quiere decir que la logística construida para hacer ganar a ciertos candidatos sea abandonada y no pueda ser reutilizada en el futuro sólo que sin “la Gordillo”.

Segundo, su arresto permite a Enrique Peña Nieto buscar, durante su desempeño, la legitimidad de origen que no obtuvo en las pasadas elecciones presidenciales debido a que superó con creces los gastos de campaña, a la compra de votos, las tarjetas Soriana y el conocido caso Monexgate, entre otros. Ofrecerle a la sociedad la cabeza de la lideresa sindical más poderosa del país a quien se acusa, en parte con razón pero de manera excesiva, de ser la única causante del bajo nivel educativo de este país, sin tocar el tema en torno a sus aportaciones a la misma campaña electoral priísta, puede redituarle muy buenos frutos en el corto y largo plazo.

Tercero, conlleva un cambio en la estrategia de comunicación política que diferencia claramente a esta administración de los gobiernos panistas, en especial al de Felipe Calderón, donde los montajes televisivos y los juicios mediáticos sustituyeron la acción de las autoridades en materia de investigación y aplicación de la justicia y cuyos errores dieron paso a aberraciones como la liberación de una secuestradora a quien se violó su derecho al debido proceso. Pero más allá de la formalidad y cuidado con la que el actual gobierno ha presentado a la sociedad este caso, debemos esperar que se lleve hasta sus últimas consecuencias y no veamos pronto a la Gordillo en las revistas de sociales muerta de la risa.

Cuarto, este arresto puede interpretarse como un mensaje a otros poderes fácticos de lo que esta administración es capaz de hacer en su contra. En cuyo caso, deberíamos esperar que se iniciaran procesos a otros corruptos líderes sindicales que se han enriquecido a costa de los trabajadores a quienes dicen representar, como el líder petrolero Carlos Romero Deschamps, quien acaba de regalar a su hijo un auto Ferrari con valor de 25 millones de pesos. O que se acote el poder de los gobernadores, las televisoras, los cárteles de la droga y la delincuencia organizada, etc. De lo contrario, será sólo una estrategia mediática para lograr legitimidad, pero no para recomponer de manera profunda el mapa del poder en México y los intereses en él enquistados.

Quinto, el tiempo dirá si esta medida va encaminada a restablecer el poder autoritario de un viejo partido, que impone su fuerza sobre un sindicato y su “incómoda lideresa”, para volver a colocar a un dirigente a modo y que utiliza este arresto para tener “contenta” a la población, atendiendo parcialmente sus demandas y como una cortina de humo, muy al estilo de los viejos tiempos, para distraerla mientras en el Congreso se aprueban dos de sus pretendidas reformas estructurales: la energética y la fiscal. Y que al salir del “engolosinamiento” con la Gordillo, el petróleo ya no sea nuestro y estemos pagando IVA generalizado a medicinas y alimentos. O si por el contrario, vamos en camino a una sociedad más democrática y justa, en cuyo caso la acción contra la “maestra” será el inicio de una serie de medidas encaminadas a construir un equilibrio más justo entre los diversos grupos de la sociedad.

Finalmente, si consideramos que esta aprehensión sirve a la presidencia de la República para varios fines, deberá incluirse en el libro de texto de los próximos presidentes de México y sus funcionarios más cercanos como el Secretario de Gobernación y el Procurador General de la República, como una lección aprendida ya aplicada en tiempos no muy remotos.